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miércoles, 12 de agosto de 2020

Una aproximación a la trama laboral del proletariado fabril en Cochabamba

 

Tania Aillón Gómez

 

A partir de información recogida, entre los trabajadores de la industria en Cochabamba, este artículo muestra y reflexiona su carrera ocupacional; para esto, se recupera la definición de carrera de un exponente de la escuela de Chicago, E.C. Hughes, quien nos abre  la puerta a la superación de  la oposición; típicamente funcionalista, entre los profesionales poseedores de una carrera y los trabajadores “ordinarios”, que están desprovistos de ella, porque Hughes redefine a  la carrera como un proceso de cambio en el curso de un ciclo de vida, entre actividades o tareas que no; necesariamente, son signo de jerarquización, de ahí que se pueda reconocer, que todo el mundo tiene una carrera, pero no todo el mundo tiene la oportunidad de contar con una carrera burocrática; es decir, una progresión más o menos regular; a través de etapas caracterizadas por un aumento de ingresos, autoridad y prestigio[i].  De hecho, la mayor parte de los trabajadores que estudiamos, no tienen la oportunidad de pertenecer a espacios laborales, que les aseguren una carrera bien trazada (más aun, en un periodo histórico caracterizado por la eventualidad del trabajo); sin embargo, esto no significa que no existan regularidades, de las que se pueda participar y que no se puedan descubrir.  En todos los casos, para Hughes, la carrera aparece como una cadena de alternativas, más o menos estructurada, por una división del trabajo, ella misma, en proceso de transformación; un proceso en el que la tarea del sociólogo, consiste en reconstruir la carrera de las personas, situándola en las modificaciones del contexto, conjugando los aspectos subjetivos y biográficos con las condiciones históricas que los explican.  Desde esta perspectiva, para ir dibujando un perfil del proletariado fabril en nuestra región, nos proponemos mostrar y valorar, de manera sucinta: cuáles son algunos los rasgos que caracterizan la carrera de los trabajadores fabriles en la región de Cochabamba.

 

1. SON MIGRANTES DE PRIMERA Y SEGUNDA GENERACIÓN

El primer vuelco ocupacional que encontramos entre estos trabajadores, se produce cuando, imposibilitados de encontrar trabajo en los lugares de origen (en la mayor parte de los casos se trata del área rural), se ven obligados a migrar a la ciudad, para sobrevivir, de lo que dan cuenta sus testimonios:

[A]llá ha sido mucha sequía, más que todo la agricultura es para el consumo no más a veces no alcanza, a veces, ahí tiempo no acompaña la lluvia, no acompaña los riegos, si no puro temporales digamos, con la lluvia no más, cuando no llueve no hay no produce, aja no produce, falta para consumo(..) por eso hemos emigrado hacia Cochabamba, a Oruro a las ciudades hemos migrado, entonces, así he estado manteniendo, pero ya más sequia más sequía ha habido casi estoy como de 17 a 18 años”(Testimonio de un obrero fabril).

[c]uando se ha fallecido mi papa con mis 11 años yo me quede huérfano de mi papa, yo vivía con mi mama no más con mi mama yo tenía, tengo 2, 3 hermanos somos y una hermanastra, como yo era el mayorcito como papa yo era, vivía con mi mama con mis hermanitos, después cuando ya tenía 15 años jovencito, me he venido a Oruro, a trabajarme así…” (Testimonio de un obrero fabril).

“[M]uy bien, yo procedo de una familia que vive acá a lado de la FINO mismo, a unas dos o tres cuadras, en este sector siempre. Yo me crie con mis abuelos, que eran agricultores.

Bueno, yo me llamo Senon Cala, vengo de Potosí, mis padres son potosinos del campo, de halla del norte de Potosí” (Testimonio de un obrero fabril).  

Para estos obreros, cuya llegada a Cochabamba se dio en la era neoliberal, el campo no era un lugar donde se podrían labrar una perspectiva económica, el campo está en ellos, asociado a la escasez, a la falta de oportunidades. Estas decisiones individuales y familiares de migrar, se inscriben dentro de la dinámica de disolución de las formas parcelarias de producción, base de la reproducción familiar; disolución acelerada por medidas institucionales de corte neoliberal, que profundizaron la crisis de la economía parcelaria[ii]

Otro grupo de trabajadores, hijos de mineros, que se vieron obligados a emigrar de las minas a Cochabamba, cuando sus padres fueron despedidos con la “relocalización”; en este caso, la disolución de un ciclo de acumulación basado en la actividad minera estatal y los cambios en la regulación de las relaciones laborales (flexibilización laboral) explican la decisión de las familias de los ex mineros, de migrar a centros urbanos como Cochabamba. Para otro grupo de trabajadores, el vuelque ocupacional no  es tan abrupto, ellos nacieron en la ciudad de Cochabamba; unas veces, se trata de una segunda generación de migrantes, mientras que otros provienen de familias de la periferia de la  ciudad de Cochabamba; algunos de ellos, viven en barrios que circundan las fábricas, de las que luego se convierten en sus trabajadores: “[S]i, y la casita, como le digo, siempre hemos sido lugareños, de este lugar, desde mis abuelos. Por eso, desde que tengo uso de razón, conozco lo que es la fábrica, el crecimiento de la misma fabrica, tengo conocimiento desde que tengo uso de razón” (Testimonio de obrero fabril).

 

2. LOS PRIMEROS REFUGIOS LABORALES

Las ocupaciones, anteriores al ingreso a la fábrica, en la que encontramos a estos trabajadores, dependen de si se trata de una mujer o de un varón. Las mujeres al llegar a la ciudad o insertarse por primera vez al mercado laboral, trabajan como empleadas domésticas o en servicios diversos que tienen que ver con ser ayudante de cocina o mesera en restaurantes o dedicarse al pequeño comercio. Como vemos en las estadísticas siguientes; en la categoría anterior- anterior (que se refiere a esta primera inserción laboral), se encuentra más del 50% de las mujeres distribuidas, entre el empleo como trabajadoras domesticas o en servicios diversos; solo el 29%, en la categoría anterior-anterior eran ya trabajadoras del sector industrial.

GRÁFICO 1 TRAYECTORIAS LABORALES DE OBRERAS DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN RAMO DE ACTIVIDAD DE SUS TRABAJOS ANTERIORES (EN PORCENTAJE)[iii]


Para estas trabajadoras, su inserción laboral en servicios varios y/o del hogar, es considerada como una situación de tránsito, en la perspectiva de encontrar un trabajo que les ofrezca mayores ingresos y/o estabilidad laboral. Una dirigente obrera evocaba su primer empleo en la ciudad: “[N]o, yo trabajaba en salteñería “Canguro”, yo aprendí a pulgar para hacer salteñas, entonces, yo sabía hacer salteñas, entonces empecé a trabajar en salteñeria “Canguro”y ahí solamente pulgaba las salteñas, y ganaba de eso, conseguí el trabajo  por una amiga que tenía que trabajaba y estudiaba, ella estaba estudiando en el magisterio, en la normal, entonces, de casualidad nos encontramos y le dije , mira yo sé trabajar y necesito, yo sé hacer pulgado, entonces, de esa manera yo llegue ahí” (Extracto de entrevista a obrera fabril).

 

GRAFICO 2 TRAYECTORIAS LABORALES DE OBREROS DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN RAMO DE ACTIVIDAD DE SUS TRABAJOS ANTERIORES (EN PORCENTAJE)[iv]


Cuando se trata de los varones,  las actividades que  en mayor grado los acogen en el mercado laboral, en la categoría anterior-anterior,  son las de albañil en el sector de la construcción y en servicios varios que; en este caso, están asociadas a ser ayudante de plomería, electricidad, chapería, trabajos de ayudantes en talleres donde se prestan servicios  de similar índole; trabajos caracterizados por la inestabilidad y la incertidumbre (30% de los  obreros encuestados están distribuidos en estas primeras ocupaciones) (gráfico 2); mientras una menor proporción, el 26% tenía  ya una ocupación en el sector industrial ( hay que considerar que, en estas configuraciones de carrera,  incide además,  la edad de los trabajadores, relacionada con su antigüedad en la industria).

 En este caso, las ocupaciones  anterior-anterior, pueden ser vistas, como en el caso de las mujeres, como actividades transitorias, en la búsqueda de un trabajo con mayores ingresos y/o estabilidad, este sentido se capta, cuando estos obreros evocan sus primeros puestos de trabajo:

“[E]stuve trabajando en una tienda embolsando los azúcares, arroz en eso trabajaba, embolsaba, pesaba kilos, medio kilos, arrobas en unas bolsitas y pillaba, y eso entregábamos a las tiendas”;  “[N]o, trabajaba en un taller que era mmm mecánica Soto, trabajé, más o menos durante un año, de ahí ya sabía más o menos como reparar motor”; “[B]ueno, tal vez, donde trabajaba no era, un, el caballero que trabajaba era muy bueno, nos enseñaba, también, como reparar un camión no, todas las experiencias que tenía pero, para entonces ,no se ganaba mucho, el sueldo era muy poco pero ganabas digamos, en el aspecto que estaba aprendiendo mucho más”; “[L]uego de peregrinar un poco en el tema de trabajo, porque empecé de pintor, hacía letreros luminosos, en PANAFLEX, he estado unos seis meses en esa actividad”; “[D]e peón si, de peoncito así casi hasta mis 18 años, desde mis 16 años me empecé a trabajar, aquí a una empresa JEISS, hasta mis 21 años, “[V]endedor ambulante o los que ofrecen de otras empresas, si, ahí fui, el trabajo era muy pesado,  porque esas veces estuvimos vendiendo licuadoras, ganábamos por porcentajes, el trabajo era más jodido porque entrabamos a las 7:30, tenía que ir de Quillacollo a la ciudad, de la ciudad me llevaban al lado de Sacaba a ofrecer los productos, desde las 6 de la tarde teníamos que cambiar de oficina, informes, casi a las 8 llegaba a mi casa, con eso inicie” (Extractos de entrevistas a trabajadores fabriles).

3. LAS EXPECTATIVAS DE ESTUDIO TRUNCADAS

Las carreras de estos trabajadores tienen, como una de sus dimensiones explicativas, las expectativas del estudio truncadas. Debido a su origen anclado en clases sociales subalternas, un acontecimiento familiar, como la pérdida del principal proveedor de ingresos  de la  familia, el padre, o los bajos ingresos familiares que no alcanzan para sostener el estudio de los hijos, suelen ser motivo para el abandono de las perspectivas de profesionalización:

“[P]ero; lamentablemente, te digo la vida te coloca trabas y no puedes salir como tu quisieras; entonces; como te digo, él falleció(se refiere a su papá), ya no había sostén en mi familia, mi hermano mayor se casó, se fue con su respectiva familia, mi madre quedó sola, entonces, yo tenía que hacerme cargo de mi familia, fue de esa manera, también, que dejé los estudios y me puse a trabajar; “[S]i y a mí me han hecho estudiar, mis papas, me han dejado así como de 8 años de edad, no me dio después con mi mama no más ya he vivido y me ha hecho estudiar hasta 5to básico no más, y después me dediqué así poco a poco, a trabajarme, así de peoncito”; en otros casos, la necesidad de priorizar el trabajo, para no perderlo, se convierte en fuente de presión, para dejar el estudio:  “[E]n realidad, los turnistas tienen poca posibilidad al respecto de seguir capacitándose, porque cuando estás en el turno de segunda o tercera, es un poco complicado ir a pasar, o sea, no hay tiempo de pasar, y si solo vas a pasar una semana, y otra no, pierdes el hilo ¿no? Es por esa razón que no he continuado con los estudios ¿no?” (Extractos de entrevistas a trabajadores fabriles).

El estudio en algún instituto técnico, suele ser asumido como una alternativa, ante las dificultades para continuar estudios superiores. Varios de estos trabajadores; principalmente, los varones, estudian carreras técnicas como mecánica en motores:

“[M]e voy a estudiar mecánica automotriz al Germán Busch, al instituto Germán Busch, del Germán Busch he salido, para mecánico motores diesel y a explosión ya, he salido de eso del Germán Busch y estuve sin trabajo”; “[P]or qué elijo digamos motores, eh, mi papa tenía como te digo camiones trabajaba como te digo, con mi papa siempre, era mayorista como te digo tenía camiones, entonces, como tenía camiones, bueno entrando al instituto podía haber digamos reparado sus camiones de mi papa de algo me serviría tal vez, con alguno de eso camiones puedo trabajar en el negocio pero no se dio eso y fui a trabajar al taller mecánico, taller mecánica Soto”; “[T]ambién,  estudie después, ya el 82, en este instituto como se llama, el Abaroa, ahí sí, en el Abaroa ahí sí, instituto ahora todavía no se si sigue; entonces, ahí estudie mecánica de movilidades, también, trabajaba de ayudante, de esa forma, estuve cuando el 82 o a ver, el 82 o el 79, 80 me case”; “[E]n la escuela de la Vida, hice mis primeros pasos en el colegio Victor Agustin, Victor Manuel Mallón, un colegio industrial, donde hice mecánica automotriz, cursé tres años de mecánica automotriz y me fui a Tupiza, no pude seguir estos cursos, y con esa base empecé a trabajar como mecánico” (Extractos de entrevistas a trabajadores fabriles).

Esta presencia importante de trabajadores fabriles que optan por el estudio de carreras técnicas, se relaciona con la política que asumen los empresarios dentro de sus mercados internos de trabajo, en relación a la designación de puestos y a la promoción de los obreros a puestos de mayor rango relativo. A la hora de contratar fuerza de trabajo, si el trabajador tiene una formación a nivel técnico, podrá ser contratado como ayudante de técnico de mantenimiento o como técnico de mantenimiento, lo que le permite acceder, rápidamente, a un puesto mejor pagado y reconocido que los de operador manual o de operador de maquinaria; esto moviliza a los grupos de potenciales trabajadores de las fábricas en nuestro medio, pero también, a los trabajadores que ya son parte de la plantilla de alguna fabrica. El estudio sacrificado en institutos técnicos luego del trabajo, forma parte de la expectativa de promocionarse a mejores puestos de trabajo entre ellos. El otro aspecto movilizador, tiene connotaciones de jerarquización social; el situarse en puestos como el de técnico de mantenimiento, desde la percepción de estos obreros, los hace desprenderse de la condición de obrero, para transitar a una más próxima a la de un ingeniero; más reconocida y valorada; no solo económicamente; sino además, socialmente.

4. LA CARRERA PERMEADA POR LA CLASE DE ORIGEN Y EL SEXO

Una sociedad como la nuestra, donde reina la división de clase, la discriminación de sexos y de etnias, hace que cada individuo se desarrolle de forma extremadamente unilateral, desplegando algunas habilidades, mediante la eliminación de desarrollar otras;  esto saca a la luz, los límites que encuentran los individuos, para hacer de las riquezas de la cultura su propiedad, porque estos límites no dependen; solamente, de ellos, sino  de la división del trabajo característico de la sociedad[v]. Esto significa que,  la asimilación real de una u otra área de la cultura, de una u otra forma de actividad humana, para cada individuo, alcanzará el límite en que es capaz de desarrollarla, dentro de determinadas condiciones históricas; en la medida en que, como bien precisaba Marx[vi], los individuos asimilan el mundo y lo constituyen, pero no lo hacen a su libre albedrío; sino en el marco de determinadas condiciones históricas.  En este sentido, el curso que dibujan las carreras de los trabajadores de la industria regional, está permeado por las desigualdades de clase y las discriminaciones sociales de sexo o de etnia.

GRÁFICO 3

   NIVEL DE INSTRUCCIÓN DEL OBRERO/A DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN OCUPACIÓN DEL PADRE (EN PORCENTAJE)[vii]


De esta manera, una primera aproximación, nos muestra que  cuando relacionamos el nivel de instrucción de estos trabajadores con la ocupación paterna (como proxy de la posición de clase de la que provienen), la mayor proporción de trabajadores, que tienen como padre a un campesino agricultor, alcanzan sólo  el nivel primario de instrucción, una notoria menor proporción de ellos estudian hasta nivel secundario, mientras es menos frecuente encontrarlos con una formación a nivel técnico o universitario (gráfico 3).  La posibilidad de formarse, a nivel de técnico medio, técnico superior o universitario, está asociada; más bien, a padres que han tenido o tienen como ocupación, actividades que se realizan en el espacio urbano, resalta; como ejemplo, que los hijos de oficinistas (que pueden asimilarse a una clase media urbana) en importante proporción, alcanza a formarse a nivel de técnico superior y universitario (gráfico 3).

GRÁFICO 4

PUESTO DE TRABAJO DEL OBRERO/A DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN OCUPACIÓN DEL PADRE (EN PORCENTAJE)[viii]

 


Estas posibilidades de formación, relacionadas con la posición en la ocupación del padre, dentro la división social del trabajo, parecen; también, atravesar el curso de la carrera de estos trabajadores, dentro de la división técnica del trabajo, al interior de la fábrica. Los hijos de los trabajadores agrícolas o pecuarios; en mayor proporción, ocupan los puestos más bajos en la escala de ocupaciones.  Transporte y logística (asociada a tareas de limpieza), concentran a la mayor proporción de hijos que provienen de agricultores, los que no tienen ninguna presencia como capataces o supervisores; una presencia mínima, como técnicos de mantenimiento (un puesto bien valorado por los obreros, como vimos anteriormente) y; en alguna proporción, están colocados como obreros manuales y operadores de maquinaria. Mientras que los hijos de oficinistas, asociados más a una clase media urbana, ocupan, en importante proporción, puestos de control como los de capataz o supervisor (gráfico 4). De alguna manera, la posición que la familia tiene dentro de la división social del trabajo, permea las posibilidades de carrera y de colocación de estos trabajadores, dentro de la división técnica del trabajo.

Ser mujer trabajadora en la industria, delinea; también, una perspectiva de carrera, es notoria la segregación ocupacional, que las concentra en ciertas ocupaciones. Sí al inicio de su carrera laboral; a la llegada a la ciudad, las encontramos concentradas como trabajadoras domésticas,  auxiliares de restaurantes o en el pequeño comercio, en las fábricas tienen la exclusividad de las tareas de limpieza; ellas están; también, concentradas en ocupaciones que demandan ciertas destrezas manuales, como las de control de calidad y / de operador directo o manual; en cambio, las encontramos excluidas de ocupaciones como la de operador de instalaciones o de mantenimiento, o de ocupaciones de técnico de campo o de controlador de procesos; ambas  relacionadas con cierto nivel de  formación  técnica y  mejores   salarios  (gráfico 5).   

 

GRÁFICO 5 OBREROS/AS DE LA INDUSTRIA POR TIPO DE FUNCIÓN, SEGÚN SEXO

(EN PORCENTAJE)[ix]


  Si asociamos esta segregación en la ocupación, con las posibilidades de ascenso laboral, vemos que, tanto la ocupación de limpieza o la de obrero manual, donde se concentran las trabajadoras, son las que menos posibilidades de ascenso laboral presentan (grafico 6).

 

GRÁFICO 6 PUESTO DE TRABAJO DE LOS OBREROS/AS DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN ASCENSO EN EL MERCADO INTERNO DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA

(EN PORCENTAJE)[x]

Este análisis es coherente con los resultados que, respecto a las posibilidades de ascenso laboral entre sexos, encontramos en el conjunto de trabajadores considerados en nuestra muestra, entre los varones, el 54% fueron ascendidos de sus puestos iniciales, mientras que sólo un 38% de las trabajadoras tenían esta situación.

5. LA FÁBRICA COMO MEJOR ALTERNATIVA LABORAL

El material empírico presentado, nos muestra la carrera de estos trabajadores, como un proceso de cambio en el curso de su vida, entre actividades o tareas que no; necesariamente, pueden considerarse como una progresión más o menos regular; que signifique, como nos dice Hughes un aumento de ingresos, autoridad y prestigio (aunque también puede tener ese significado), pero que está marcada, por la búsqueda de una mayor estabilidad laboral. Para estas personas que, al llegar a la ciudad, solo encuentran trabajos esporádicos, poco estables, en pequeños negocios o comercios; alcanzar a formar parte de la plantilla laboral de una fábrica, significa la seguridad en el ingreso mensual, este es uno de los criterios que predomina; entre ellos, cuando les preguntamos el motivo por el que dejaron los empleos anteriores (gráfico 7).

GRÁFICO 7

OBREROS DE LA INDUSTRIA MANUFACTURERA SEGÚN MOTIVOS POR EL QUE CAMBIAN UN TRABAJO ANTERIOR, POR EL DE LA FÁBRICA (EN PORCENTAJES)[xi]


 La fábrica, entre los trabajadores fabriles, está asociada a la posibilidad de mayor estabilidad laboral, a la apertura de nuevas oportunidades de trabajo y, también, a la posibilidad de tener mejores ingresos, en relación a los que se conseguían en ocupaciones anteriores. Desde sus valoraciones, la fábrica representa una mejora en su situación laboral. Para algunos; incluso, se convierte en una búsqueda ansiada: “[E]n realidad, todo esto era un anhelo de mí, desde pequeño cuando veía la empresa, quería trabajar en esta empresa. Bueno siempre he soñado con entrar ¿no? Se ha cumplido mi sueño de poder pertenecer a esta gran empresa. Entonces es en ese sentido que estoy, hasta estos días, trabajando ¿no?” (Extracto de entrevista a obrero fabril). Respecto al pasado laboral, ligado al mundo agrario, la fabrica significa dejar de vivir en el campo, hacerse a la vida urbana, en términos no solo económicos, sino también, culturales, aprender a hablar con propiedad el idioma castellano, abrir perspectivas de ascenso social para los hijos; mejores oportunidades de estudio y de trabajo, dentro de una jerarquización social en la que el campo significa aislamiento, pobreza y atraso.

REFLEXIONES FINALES

Este bosquejo  de algunos hitos del entramado  laboral de los trabajadores fabriles de nuestra región,  nos permite ver a su carrera ocupacional,  como una cadena de alternativas, más o menos estructurada, por una división del trabajo por clase, por lugar de origen y por sexo; el termino de alternativas[xii], nos abre la posibilidad de romper, con  una mirada determinista (estructuralista), porque; como nos muestran los testimonios obreros; trabajadores y trabajadoras hacen elecciones, buscan alternativas, dentro de las posibilidades que les ofrece  su origen de clase o su sexo; es decir, que en el recorrido que toman  sus carreras, se conjugan ambas dimensiones,  los aspectos subjetivos y biográficos, con las condiciones históricas que los explican. Se trata; entonces, de comprender y explicar, las carreras laborales, como un entramado (más que como una  trayectoria, que da la idea de procesos lineales) en el que se conjugan   condiciones objetivas, con  biografías familiares y decisiones individuales,  que constituyen a los trabajadores  como   sujetos activos,  sin abstraerlos (como hace el individualismo metodológico) de su situación histórico social, como hijos de obreros o de oficinistas de la clase media urbana o como hijos de campesinos del área rural, como mujeres o varones, con todas las implicaciones que aquello tiene, para sus posibilidades de carrera.  Enfrentados a decisiones individuales, por falta de ingresos familiares o por la muerte del padre, como principal sostén del hogar, esos trabajadores van constituyendo su carrera laboral, permeada por las desigualdades de clase y discriminaciones de sexo o de etnia, que les muestran que sus posibilidades y sus límites no dependen; solamente, de sus elecciones o de su voluntad; sino también, de la división social del trabajo que caracteriza nuestra sociedad[xiii].



[i] Es desde esta perspectiva, que Hughes se propone un cuadro de análisis, para estudiar a los pescadores de alta mar de la ciudad de Hull. Ver: Tripier, Pierre (1998) “De la Theologie protestante a la sociologie du travail : archeologie des travaux de Hughes et de la ‘Seconde Ecole de Chicago‘”, en Travail et Emploi, Nº 75.

[ii] En la era neoliberal, los flujos migratorios del campo a la ciudad, se incrementaron por la  profundización de la crisis de la pequeña economía campesina; en la medida que la política de administración de tierras  estuvo dirigida  a apoyar un proceso de concentración y centralización de tierras; principalmente, en el  sector capitalista del oriente, con instrumentos de legitimación como  la Ley INRA,  que  estuvieron  dirigidos a consolidar la orientación agroexportadora (mono productora) de las políticas neoliberales,  con la  legalización de  la concentración de tierras productivas en el oriente del país, en manos de terratenientes. Ver: Grupo Llank’aymanta (2008) Lucha de clases en Bolivia: Contenido y tendencias del proceso político actual. Ponencia presentada en las I Jornadas Internacionales de Investigación y Debate Político “Proletarios del mundo, uníos”.

[iii] Fuente: Elaboración propia, con base en datos obtenidos de la encuesta a obreros y obreras de la industria de Cochabamba, en el marco del proyecto “Mercados de trabajo y acumulación de capital”,  Instituto de Estudios Sociales y Económicos (2014).

[iv] Ídem.

[v] Ilienkov, Elvad Vasilievich (2007) Dialéctica de lo abstracto y lo concreto en “El Capital” de Marx. Quito: Ediciones EDITHOR

[vi] Marx, Karl (1971) Obras Escogidas, Tomo 1. Moscú: Editorial Progreso

[vii] Fuente: Elaboración propia, con base en datos obtenidos de la encuesta a obreros y obreras de la industria de Cochabamba, en el marco del proyecto “Mercados de trabajo y acumulación de capital”, Instituto de Estudios Sociales y Económicos (2014).

[viii] Ídem.

[ix] Ídem.

[x] Fuente: Elaboración propia, con base en datos obtenidos de la encuesta a obreros y obreras de la industria de Cochabamba, en el marco del proyecto “Mercados de trabajo y acumulación de capital”, Instituto de Estudios Sociales y Económicos (2014).

[xi] Ídem.

[xii] Tripier, Pierre (1998) “De la Theologie protestante a la sociologie du travail : archeologie des travaux de Hughes et de la ‘Seconde Ecole de Chicago‘”, en Travail et Emploi, Nº 75.

[xiii] Ilienkov, Elvad Vasilievich (2007) Dialéctica de lo abstracto y lo concreto en “El Capital” de Marx. Quito: Ediciones EDITHOR


sábado, 25 de julio de 2020

Cambios en el sentido de la lucha obrera sindical en tiempos de COVID


Luis Fernando Castro López


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Fotografía:  https://www.paginasiete.bo, 28/06/2020
En las últimas semanas, la salida de la cuarentena rígida a una cuarentena dinámica ha servido para que las tensiones generadas por intereses opuestos, se manifiesten públicamente, mediante manifestaciones, movilizaciones y medidas de presión. Solo en la primera semana de la cuarentena dinámica, las oficinas del Ministerio de Trabajo fueron asediadas por largas filas de trabajadores asalariados, con denuncias de despidos y violaciones a sus derechos laborales[i]. Por su lado, los maestros rurales y urbanos, protagonizan piquetes de huelga de hambre y varios sectores sociales se declararon en emergencia, frente al despido masivo de sus afiliados. Ante este escenario, nos preguntamos ¿Cuál es la perspectiva de la lucha obrera ante la crisis económica y sanitaria en Bolivia?

1. LA SITUACIÓN DE LOS TRABAJADORES ANTES DE LA CRISIS SANITARIA

Si bien la crisis sanitaria ha tenido consecuencias específicas sobre la situación del trabajo, es necesario hacer un análisis de la condición de los trabajadores,  previa  a la pandemia y a la cuarentena.

La recesión económica a nivel mundial, empezó a tener efectos significativos en Bolivia, desde el año 2014; todos los indicadores de producción y de empleo del año 2013 empezaron a caer[ii]. Por ejemplo, la Tasa de Crecimiento del PIB a precios constantes, que llego a casi 7% el año 2013, fue cayendo, hasta que, en los años 2018 y 2019, oscilo entre el 4 y el 4,5%. Entre el 2013 y el 2019, el porcentaje de obreros asalariados cayó entre 6 y 7 %. En el mismo periodo, el empleo en el sector empresarial se redujo en 7% y en el sector semi-empresarial, en 3%[iii]. En cuanto a la creación y cierre de empresas, desde el 2014, se produjo una caída constante de la cantidad de empresas creadas[iv]. En esta situación, los despidos aumentaron y, en consecuencia, los episodios de protesta y los procesos judiciales por problemas laborales. En este periodo, como no podía ser de otra manera, la contienda, entre obreros, patrones y gobierno, se dio; principalmente, en torno al problema de la estabilidad laboral[v]. Esta disputa se produjo; sobre todo, en el espacio legal, donde las burocracias buscaban normas que aseguren la estabilidad de los sindicalizados, mientras los patrones recurrían a una serie de medidas legales, para desvincular a trabajadores. Por su parte, los sindicatos de base estaban atrapados con la patronal, en reyertas propias del sindicalismo legalista[vi].

Para el 2018, la posición pro patronal del gobierno, se fue acentuando y, frente al peligro de movilizaciones, el gobierno del MAS,  intervino a las direcciones sindicales contestatarias e impuso la elección de Juan Carlos Guarachi como ejecutivo de la COB. La intervención directa del gobierno, en las principales organizaciones sindicales, fue la manifestación concreta de una crisis de hegemonía de la burocracia afín al MAS, al interior de la COB; una crisis de hegemonía que, meses antes de las elecciones nacionales, se manifestó en movilizaciones obreras fuera del control de las direcciones sindicales; se vivía un proceso de separación de las bases obreras, de sus direcciones sindicales[vii].

Durante la protesta de la clase media, liderada por los partidos de derecha y los comités cívicos; la escasa convocatoria de la COB se debió a esta crisis de dirección; de hecho, algunas organizaciones obreras, se unieron a los comités cívicos y otras pocas, salieron a defender al gobierno del MAS, mientras la mayor parte del proletariado sindicalizado estuvo orgánicamente desmovilizado.  En la situación previa a la crisis generada por la pandemia, se tiene; entonces, una crisis económica, la reducción del empleo asalariado, que se manifiesta en procesos de despido y cierre de empresas y una crisis de hegemonía al interior de la COB.

2. EL CAMBIO CUALITATIVO EN LA DISPUTA ENTRE OBREROS Y PATRONES

En el nuevo gobierno de facto de Añez, la disputa entre obreros y patrones, se da en medio de la escalada de contagios del COVID 19 y la implementación de un periodo de cuarentena que, hasta la fecha, no ha concluido; se vive; actualmente, una crisis sanitaria por el aumento de contagios y la saturación del sistema de salud.

Fotografía: RENNO - Noticias Obreras, 11/07/2020
En todo este tiempo de cuarentena, las tendencias negativas en el crecimiento del empleo se acentuaron, según los datos del INE, la tasa de desempleo abierto ha crecido de manera sostenida desde octubre de 2019 (mes en que empezaron las movilizaciones sociales contra el MAS); pero desde abril (mes en que empezó la cuarentena), la tasa de desempleo abierto alcanzó un significativo 7 %[viii].

Si bien el gobierno decretó normas que, en teoría, protegían el empleo en el tiempo de la cuarentena, en la práctica, estas medidas no fueron cumplidas por los empresarios, de hecho, el propio gobierno despidió a varios trabajadores de la administración pública. En las semanas de desarrollo de la cuarentena, hubo un aumento de denuncias, no sólo de despidos; sino también, de incumplimiento de medidas de bioseguridad en el trabajo y de la escalada de contagios en obreros de diversas empresas, denuncias frente a la las cuales, el actual gobierno no tomó medidas efectivas.

El aumento de contagios y muertes por COVID19 ha llevado a una crisis sanitaria y de colapso del precario sistema de salud, al mismo tiempo que aceleró la crisis económica en curso, empujando a las patronales a tomar medidas de hecho, para salvar su capital, con el consentimiento del actual gobierno. En estas circunstancias, si bien, la lucha entre obreros y patrones, se iba tornando cada vez más abierta antes de las elecciones nacionales de 2019, la caída de Evo Morales puso una pausa a ese proceso, pausa en la cual, los obreros estaban buscando reposicionarse, frente al ascenso del nuevo gobierno de facto. 

Con la crisis sanitaria acelerada por la pandemia, los enfrentamientos entre obreros y patrones, fueron modificándose en algunos términos. Los puntos de lucha en torno al problema de la estabilidad laboral se acentuaron, pero, además, ha emergido un espacio de contienda alrededor de las medidas de bioseguridad en el trabajo, donde obreros y patrones se disputan por definir quién va a cargar con la responsabilidad del contagio de COVID19.  La disputa entre obreros patrones y gobierno, cada vez más, gira entorno a quien va a terminar cargando las consecuencias de la crisis económica agudizada por la epidemia del COVID19.

 Hoy, con motivo  de la crisis sanitaria, el gobierno y los patrones están aplicando un plan de recorte y flexibilización laboral, de manera práctica, este plan no ha sido legalmente aprobado, porque su legalización provocaría una escalada acelerada de movilizaciones sindicales, que ahondaría la crisis política de un gobierno transitorio asentado en las armas.

La aplicación de este plan flexibilizador, por parte de las patronales, ha empujado a los obreros a adoptar medidas de presión y movilizaciones sectoriales, para la defensa de su trabajo y su salud. El escenario de luchas dejó de ser el espacio judicial (dominante en la época del MAS) y, cada vez más, los obreros toman las calles, esto se debe; no sólo a la posición pro patronal del gobierno central de Añez; sino también, a la ineficacia del espacio legal, para persuadir a los patrones, para   que cumplan la Ley[ix].

Los patrones están dispuestos a omitir cualquier responsabilidad legal con sus obreros, como es el caso ALFITIERS, donde los patrones se niegan a cumplir con la disposición judicial de reincorporación o en VIDRIOLUX, donde retiraron a trabajadores sin ninguna declaración de quiebra. También, utilizan diversas formas de presión, para que los obreros decidan retirarse voluntariamente. Los patrones ya no recurren a ninguna argucia legal, para  sus acciones, cada vez más, actúan de hecho, incluso en torno a los problemas de bioseguridad, las patronales toman la decisión de obligar a los trabajadores a trabajar aun con COVID, sin temor a alguna sanción penal.

Con el avance acelerado de la crisis, la lucha entre obreros y patrones se ha ido tornando más violenta, los obreros han tendido a establecer medidas de presión como el paro de la empresa (es el caso de los sindicatos de INCERPAZ, INCERCRUZ), con piquetes de huelga hambre (el caso del sindicato de FANCESA), también la realización de vigilias y  tomas de los lugares de ingreso de la fábrica (es la medida asumida por los sindicatos de PROSIL, ALTIFIBERS, del HOTEL PLAZA); al mismo tiempo, las medidas de presión de los obreros son respondidas con la intervención de las fuerzas represivas del Estado, como la intervención en la vigilia sindicato de ALTIFIBERS o la represión física a los obreros de INCERCRUZ. Los despidos masivos en la época de cuarentena y las muertes por COVID por la exposición de los obreros al contagio, van planteando al asalariado en general; y al movimiento sindical en particular, una lucha por su sobrevivencia, como decía un obrero fabril, “ahora los obreros estamos viviendo varias bajas, varios estamos muriendo, hoy nos estamos jugando nuestra vida porque estos nos quieren eliminar”[x]. Para los obreros, hoy el sindicalismo se está jugando una de sus cartas de sobrevivencia. Los llamados a marchas de protesta por parte de las federaciones departamentales de fabriles y las centrales obreras departamentales, muestran; justamente, que los obreros están tomando medidas de hecho, frente a “la masacre blanca”[xi] practicada por las patronales.

Esta situación pone a los obreros, en la encrucijada, de continuar la resistencia por la vía legal o adoptar la acción directa, como método de lucha.  Se trata un de un proceso de desprendimiento paulatino, de la lucha legalista que caracterizó a la práctica sindical durante la era del MAS[xii], hacia medidas de hecho, que la clase obrera va asumiendo, abriendo la posibilidad al desarrollo del “buen sentido obrero”[xiii], aun en su fase germinal.    

3.  LA COB FRENTE AL NUEVO ESCENARIO Y LAS ALTERNATIVAS DE LA LUCHA OBRERA EN CURSO      

Fotografía: https://www.radiofides.com, 14/07/2020
Si la burocracia dirigente de la COB, estaba viviendo una ruptura con sus bases, ¿Por qué hoy convoca a una movilización nacional? ¿Bajo qué certidumbre calculan que su llamado tenga la aceptación de las bases?

Al inicio del año, los obreros, bajo la consigna de independencia sindical, planteaban un recambio dirigencial en todos sus niveles; es decir, en un contexto de despidos masivos, de ascenso de un gobierno afín a los patrones, las bases obreras veían necesaria la reorganización de sus organizaciones sindicales, mediante la sustitución de la burocracia afín al derrocado gobierno del MAS, ya que estas dirigencias habían perdido legitimidad.

Sin embargo, la pandemia y el estado excepcional de cuarentena, ha frenado  este proceso, no sólo por la imposibilidad de que se realicen congresos y  elecciones directas; sino también, porque las medidas tomadas por el gobierno, en favor de la patronales, impusieron como prioridad,  dar una respuesta inmediata,  a las denuncias de incumplimiento patronal, de manera que se vive una ambiente de quiebre o división irresuelta entre las bases y dirección de la COB, en medio  una situación, que demanda la unidad frente al ajuste patronal impulsado por el gobierno de transición.

Por otro lado, el derrocamiento de Evo Morales, propicio la dispersión de la capa burocrática de dirigentes sindicales, que aun actúan de forma sectorial, así, mientras la burocracia de la COB y de las FSTMB convocó a la “Marcha por la salud, la vida, la educación y la estabilidad laboral”, contra el gobierno de Añez. Otros burócratas regionales tratan de impedir la movilización de los obreros y reencauzar la lucha por la vía legal.

La presión de las bases es un elemento determinante de la acción calculada de la burocracia. En un contexto de escalada de movilizaciones, la burocracia de la COB, ha encontrado una especie de respiro, se agarra de la demanda de unidad llamando a acciones de movilización, en un momento en que los obreros necesitan adoptar medidas más contundentes, para frenar el avance patronal. Tanto la demanda de elecciones, frente al intento reiterado de prorrogarse del gobierno de transición, como el llamado a la marcha, son acciones de la burocracia en busca de reposicionarse; de mejor manera, en la actual situación política. Con la presión por elecciones, buscan cambiar el escenario político a su favor, con el posible regreso del MAS al poder.

Cabe preguntarse, hasta donde, la burocracia de la COB, bajo la visión legalista y reformista, en su práctica sindical[xiv], podrá liderar una lucha sostenida contra la patronal y el gobierno. Por su lado, las bases obreras están más dispuestas al enfrentamiento, se vive un ascenso en el ánimo de los obreros, en medio de la desconfianza y el rechazo a sus líderes sindicales y de la despolitización a la que fueron sometidos en la era del MAS.

4. CONSIDERACIONES FINALES

La pandemia del COVID ha acentuado la crisis que se desarrollaba desde hace unos años, propiciando un cambio cualitativo en la lucha entre obreros, patrones y gobierno.

A diferencia de principios de año, los patrones adoptaron una postura más agresiva en  la ejecución de despidos y recortes al salario, lo que ameritó una respuesta con medidas de presión, por parte de los sindicatos obreros. La lucha cada vez se torna más directa y el espacio legal va siendo desplazado como escenario principal de disputa.

Los obreros sindicalizados hoy, se plantean la necesidad de ejercer métodos de lucha más allá de la via legal, frente a la posibilidad de que los despidos masivos pongan en peligro la vitalidad del movimiento sindical. La burocracia sindical de la COB consiente de esta necesidad, busca volver a juntarse con las bases mediante la convocatoria a marchas nacionales.

En este escenario, se pueden plantear; al menos, dos alternativas: que la burocracia movilice a las bases obreras en torno a sus intereses político-partidarios y que la clase obrera, en este proceso, no logre desprenderse de la capa burocrática actual o que el camino de la lucha directa derive en la independencia de los obreros sindicalizados, respecto de sus direcciones burocratizadas y permita el ascenso de nuevas direcciones sindicales, que encaminen   una nueva política sindical. En todo caso, el predominio de una u otra vía, dependerá de cómo cristalice el “buen sentido obrero” en una conciencia política de clase, alternativa a la del legalismo sindical, promovido por la burocracia de la COB.     



[i] Trabajadores presentan más de 400 denuncias de despidos en cuarentena. Publicado en http://www.laprensa.com.bo, el 06 de junio de 2020

[ii] Aillón, Tania (2019) “El empleo industrial dentro del patrón de acumulación primario exportador en Bolivia”. Ponencia presentada en el Encuentro de investigadores: “Avances y desafíos de la investigación en ciencias sociales en Cochabamba”, INCISO-UMSS (mimeógrafo),

[iii] Datos extraídos del Dossier de estadísticas, vol. 29. Publicado en www.udape.gob.bo

[iv] Castro, Luis F. (2018) “El trasfondo de la política del gobierno ante el cierre de empresas”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.

[v] Castro, Luis F. (2019) “La ausencia del movimiento obrero ante la derrota de Evo Morales”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.

[vi] Castro, Luis F. (2020) “Las implicaciones del legalismo burgués en la práctica sindical”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.

[vii] Castro, Luis F. (2019) “La ausencia del movimiento obrero ante la derrota de Evo Morales”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.

[viii] Datos extraídos de https://www.ine.gob.bo

[ix] En este camino, los asesores empresariales y otros abogados laboralistas, entraron en la discusión, sobre la determinación de legalidad y aplicabilidad de figuras legales que permitirían el retiro o, por el contrario, la reincorporación de trabajadores despedidos. Por ejemplo, sobre la causal de fuerza mayor, como figura de legal, para recorte de personal, hay laboralistas que interpretan esta causal, a favor de las patronales, mientras que otros descartan su aplicabilidad. En esta situación, se agudiza la contraposición de intereses y se visibilizan los límites de la norma, al sacar a luz que sus diferentes interpretaciones no están sujetas a la razón legalista, sino a la razón que se imponga fuera de la esfera legal. Como dice Marx, “entre derechos iguales decide la fuerza”. La pandemia ha exacerbado las confrontaciones entre interés de obreros y patrones, y finalmente, parece ser la fuerza, la que imponga su interpretación legal legítima.

[x] Testimonio extraído de la página de Facebook Trabajadores/as y sus derechos.

[xi] La expresión expresada en las resoluciones de los ampliados de las COD y federaciones departamentales.

[xii] Castro, Luis F. (2020) “Las implicaciones del legalismo burgués en la práctica sindical”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.

[xiii] Gramsci, Antonio (1985) Introducción al estudio de la filosofía, Barcelona, Editorial Crítica

[xiv] Castro, Luis F. (2020) “Las implicaciones del legalismo burgués en la práctica sindical”. Visto en: https://llankaymantabolivia.blogspot.com, última vista el 24 de julio de 2020.


martes, 16 de junio de 2020

La orientación de la política laboral en tiempos de pandemia



Luis Fernando Castro López

Desde el inicio de la cuarentena, la movilización del trabajo asalariado se convirtió en un problema central, que exigió al gobierno, normativas específicas para su regulación, tanto en la etapa de cuarentena rígida, como en la  de cuarentena flexible. Sin embargo, durante la cuarentena rígida, se han denunciado diversos casos de abuso patronal y violación a los derechos laborales de los trabajadores.

Fotografía: Noticias obreras - RENNO, 10/06/2020
Durante  la reapertura de las oficinas del Ministerio de Trabajo, se han recibido más de 400 denuncias por incumplimiento patronal[i], en la etapa de cuarentena rígida, ahora que se entró en la etapa de cuarentena flexible, parece que el incumplimiento patronal siguió aumentando, esto muestra el último pronunciamiento de estado de emergencia de los fabriles de Cochabamba, que están enfrentando situaciones de despidos injustificados. Parece importante; entonces,  reflexionar acerca  de: ¿cuál es la orientación de la política laboral del gobierno, durante la pandemia, que parece facilitar el incumplimiento patronal a los derechos de los trabajadores?

1. LA INERCIA DEL GOBIERNO FRENTE AL INCUMPLIMIENTO PATRONAL

En la entrada a la cuarentena rígida, el gobierno aprobó normas que regularon la movilización de la fuerza de trabajo de diversas empresas, consideradas necesarias para la provisión de servicios básicos, por otro lado, estableció la permanencia y respeto de los derechos laborales de los trabajadores de empresas impedidas de funcionar por la cuarentena rígida. La resolución biministerial 001/20 del 13 de marzo, el D.S. 4196 y el D.S. 4199, regularon los lineamientos generales de bioseguridad, que las empresas deben asegurar, para prevenir el contagio de los obreros en el espacio de trabajo. Establecieron; además, una serie de licencias especiales a los trabajadores, más vulnerables, a los efectos mortales del COVID y regularon la jornada de trabajo y el procedimiento de notificación de casos sospechosos de COVID.

Pero, los lineamientos gubernamentales de prevención, no fueron acatados por las empresas, pese a que se determinó la clausura del establecimiento, como sanción por el incumplimiento a normas de bioseguridad. En consecuencia, hoy se tienen obreros contagiados por COVID. Muchos de estos casos, fueron denunciados por los obreros frente a la falta de respuesta de la empresa; es más, en varios de estos casos, se denuncia, que los patrones negaron la licencia en el trabajo, a los trabajadores que presentaban síntomas de COVID (los casos sobresalientes son los FAGAL, INGENIO GUABIRA, MATTO IMPORT- EXPORT, PLASTICOS BELEN, etc.)[ii]. Al mismo tiempo, proliferan las denuncias de empresas que no cumplen con los protocolos de bioseguridad y no dotan de ambientes adecuados, para preservar a los obreros de posibles contagios (entre los más emblemáticos: FAGAL, PEDIDOS YA!, INGENIO GUABIRA, PLASTICOS BELEN, UNAGRO, NUDELPA-COCA COLA, INDARA, EMPACAR, SAN AURELIO, etc.)[iii].

Algunos  asesores del empresariado privado, observan que es injusto responsabilizar al empresario por el contagio de COVID de sus trabajadores, porque  las empresas estarían cargando con las consecuencias de sus malas prácticas, fuera del trabajo, cosa que sale de su jurisdicción[iv]. Sin embargo, las noticias de múltiples contagios en empresas y de aislamiento por sospecha de contagio, sacan a relucir que las empresas, en general, no adecuaron el proceso de trabajo, para resguardar la seguridad de los obreros, frente al contagio del COVID.  Los mismos obreros testimonian temerosos, cómo varios de sus compañeros de trabajo, pudieron contagiarse en contacto con otros obreros que contrajeron COVID, debido justamente, a que no  se guarda la distancia necesaria, ni se cuenta  con los implementos  de bioseguridad (el caso del BELEN, SAN AURELIO, SOFIA, PLASTICOS BELEN, etc.).

Fotografía: Noticias obreras - RENNO, 15/06/2020

Si bien las empresas no son las responsables directas de la aparición de la pandemia, las condiciones precarias de explotación de la fuerza de trabajo elevan el riesgo de contagio de los trabajadores. La mayoría de las empresas funcionan con infraestructura que apenas cubre los requerimientos de higiene exigidos en una situación normal; responder a una situación de extraordinaria, como la que se vive, requeriría de una transformación de  la infraestructura, que permita el distanciamiento, entre  los trabajadores que participan del proceso de trabajo, lo que implica gastos, que las empresas no están dispuestas a realizar; sin embargo, ellas obligan a movilizarse a los trabajadores, para ir al trabajo, exponiéndolos al contagio[v].

Por otro lado, muchos trabajadores, que pertenecían a empresas que debían cumplir la cuarentena rígida, denunciaron, cómo es que les obligaron a tomar vacaciones en el tiempo de cuarentena rígida, en otros casos; las patronales procedieron al despido de trabajadoras embarazadas o trabajadores, que podían acogerse a la licencia especial por tener a su cuidado, niños menores de cinco años[vi]. En estos casos, los más perjudicados, fueron los trabajadores con contratos fijos o bajo régimen laboral de consultoría[vii]. El mismo gobierno realizó una serie de despidos, al inicio de la cuarentena rígida en YPFB[viii] y al finalizar ésta, procedió al despido de 800 profesores[ix].

¿Qué acciones tomó el Ministerio de Trabajo frente al incumplimiento patronal? 

 Las grandes filas de denuncias por incumplimiento, cuando pasó la cuarentena rígida, sacan a la luz, que las denuncias vía electrónica, no fueron efectivas, y de hecho, las empresas gozaron durante el periodo de cuarentena rígida, de un gran espacio de libertad; solo la denuncia abierta de los trabajadores, a la prensa, fue la vía de presión a la patronal. En cuanto a las inspecciones en los espacios de trabajo, como testimonian los mismos trabajadores; los patrones los equiparon de material de bioseguridad, cuando se enteraron que venía la inspección.

 Las empresas bolivianas, que tenían permitido funcionar durante la cuarentena, al movilizar trabajadores, estaban rompiendo con el principio de la cuarentena, cuya finalidad es evitar el contacto y la concentración de personas, lo que las obligaba al cumplimiento de las medidas de bioseguridad. Al no cumplir con estas medidas, son responsables directas de los posibles contagios de COVID de los trabajadores; sin embargo, la determinación de estas responsabilidades no fueron fijadas, ni reguladas por el gobierno;  mientras que  la OIT recomendó incluir al COVID como una enfermedad profesional; durante la cuarentena rígida, el gobierno, sólo reguló el posible incumplimiento de las medidas de bioseguridad, pero no   estableció medidas a tomar, en caso de que los contagios hubieran sido facilitados, por el incumplimiento patronal en normas de bioseguridad, ni se cargó a la empresa, la responsabilidad de los trabajadores contagiados por COVID.

 Mientras el gobierno hizo recaer sobre los individuos, la causal penal de atentado contra la salud pública, si se incumplían las normas que regían la cuarentena, so pena de terminar en la cárcel; se deslindó, en los hechos, de cualquier responsabilidad con la salud pública, a los patrones que fueron denunciados por incumplir las mínimas normas de bioseguridad y expusieron a los obreros al contagio por COVID, ¿es que, en este caso, no se estaba atentando, contra la salud de la población?

En consecuencia, en el transcurso de la cuarentena rígida, se constató el accionar ambiguo del gobierno, que es manifestación de  la contradicción, entre las funciones del Estado como mediador y asegurador de las condiciones medias de explotación de la fuerza de trabajo (función que comprenden la aprobación de normas que regulaban y protegen la salud de los trabajadores y el empleo)[x] y por otro lado, su posición como institución, que depende de la apropiación del excedente generado, por la explotación de fuerza de trabajo en las fábricas.

2. EL RETROCESO DEL GOBIERNO EN EL RECONOCIMIENTO DEL COVID COMO ACCIDENTE LABORAL

Durante las semanas finales de la cuarentena rígida, el gobierno aprobó normas que regulan el regreso a las actividades laborales, según el nivel de riesgo de cada región o municipio.  En la mismas normas, se establece una ampliación de los rubros productivos, que pueden iniciar actividades y si bien al inicio de la cuarentena, la posición del gobierno, con respecto a designar al COVID, como enfermedad profesional no estaba clara, para el ingreso a la cuarentena flexible el ASUSS definió al COVID como accidente laboral, coincidiendo con las recomendaciones de la OIT[xi]:  ello obligaba  los patrones, a indemnizar a las familias, por el posible fallecimiento del trabajador debido la enfermedad del COVID 19.

Fotografía: Noticias obreras - RENNO, 01/06/2020
Sin embargo, en el transcurso de las semanas posteriores a la emisión de este instructivo, las organizaciones patronales, como la CAINCO[xii], Cámara Nacional de Comercio (CNC -Bolivia), la Cámara Nacional de Industrias (CNI) y la Asociación Nacional de Comercializadores Privados de Hidrocarburos (Asosur Nacional)[xiii], empezaron una serie de presiones, para que el instructivo sea anulado, también, se manifestaron en contra, patrones ligados al gobierno transitorio, como es el caso de Samuel Doria Medina. Finalmente, el instructivo fue eliminado y se deslindó de cualquier responsabilidad a los patrones, quienes serán los principales beneficiados de la movilización de obreros durante la cuarentena flexible, en una etapa de ascenso de los contagios, que pone en riesgo a los obreros y trabajadores en general.

Además de la anulación de este instructivo, el gobierno entró en una contradicción, cuando la Resolución Ministerial 233, establece que las zonas en riesgo alto deben suspender las actividades laborales que no son necesarias, para sostener los   servicios básicos a la población, pero, la normativa de la cuarentena flexible, permite el funcionamiento de diversas ramas de la producción y extiende los horarios de trabajo. El reinicio de las actividades laborales, en medio de la subida de contagios de COVID-19, es una contradicción, que solo puede ser explicada, por las presiones de los patrones, para volver a las actividades productivas.

Si bien las primeras medidas establecidas por el gobierno, durante la cuarentena rígida,  mostraban la tensión,  entre las funciones del Estado, como mediador y asegurador de las condiciones medias de explotación de la fuerza de trabajo y  su posición como institución que depende de la apropiación del excedente generado, por la explotación de fuerza de trabajo en las fábricas, las determinaciones de la cuarentena flexible, ponen al descubierto un gobierno de los patrones (CAINCO, Samuel Doria Medina), que de forma acelerada  va  echando por la borda la autonomía relativa del Estado, fuente de legitimidad de los gobiernos burgueses, cuando adopta una posición patronal de manera abierta; mientras que, para la resolución de los problemas obreros, por incumplimiento patronal, no ha dado ninguna medida efectiva de solución, sino que dilata su atención, en la perspectiva de cansar a los trabajadores.  

3. REFLEXIONES FINALES

La propagación pandémica del COVID saca a relucir la contradicción entre las funciones del Estado como mediador y asegurador de las condiciones medias de explotación de la fuerza de trabajo y su posición como institución que depende de la explotación de fuerza de trabajo. Dentro de esta oposición de intereses entre Estado, patrones y trabadores, el gobierno, paulatinamente, asumió una posición abiertamente patronal, que se hace evidente, en su pasividad frente a las denuncias de los trabajadores, al mismo tiempo que en su complacencia con los pedidos patronales, aun cuando estos ponen en riesgo la salud de los trabajadores. Con esta posición, el régimen actual, camina hacia una arriesgada subordinación del Estado a las decisiones patronales; a la perdida acelerada de la autonomía relativa de éste.  El cierre de fábricas y despidos masivos, muestra la posibilidad, de que a mediano plazo, el gobierno avale de manera abierta, medidas de flexibilidad laboral. Hoy los patrones discuten la posibilidad de acogerse a la figura jurídica de “Fuerza mayor”, para justificar medidas flexibilizadoras, en este camino, el gobierno, parece que jugará un papel protagónico a su favor.

Toda esta avanzada patronal, desde el Estado, se da en un escenario de desmovilización del movimiento obrero, resultado de años de burocratización y desmantelamiento de la capacidad movilizadora de los sindicatos, durante el régimen  del MAS, esto se hace evidente, en su lucha atrapada en el reclamo de medidas económico corporativas, que no logran desembocar en un proyecto político. Un proyecto político de los trabajadores, que unifique a los sectores subalternos; sin embargo, las condiciones de posibilidad se irán abriendo paso, a medida que las  necesidades de empleo para sobrevivir, que tienen los trabajadores, encuentren como traba, el proyecto flexibilizador de los patrones.



[i] Trabajadores presentan más de 400 denuncias de despidos en cuarentena. Publicado en http://www.laprensa.com.bo, el 06 de junio de 2020

[ii] Ver las siguientes publicaciones en https://www.facebook.com/RENNOnoticiasobreras: Denuncia "en Ingenio Guabirá hay enfermos de covid-19 y se oculta, así se está poniendo en riesgo a todos los trabajadores, 01 de mayo de 2020; Muere obrero de Galletas Mabel´s (Fagal) por covid-19, 02 de mayo de 2020; Industrias Belen: Contagios se incrementan, empresa no costea pruebas rápidas, no paga sueldo puntual y exigen facturas para pago de primas,  10 de junio de 2020; Denuncia: Empresa Matto Import- Export SRL. confirma caso de covid-19 pero dueños instruyen continuar el trabajo sin cumplir normas de bioseguridad, 01 de junio de 2020.

[iii] Ver las siguientes publicaciones en https://www.facebook.com/RENNOnoticiasobreras: Protesta de motoqueros de PEDIDOS YA! concluye con arrestos y multas, 28 de abril 2020; Denuncian caso positivo de covid-19 en Plásticos Belén y que los hacen hacer cola para lavarse las manos en un turril, 05  de mayo del 2020; Obrero de Unagro muere por covid-19 , hay otro positivo y 10 aislados, la empresa aún no realiza desinfección de la planta, 08 de mayo de 2020; Resolución expresa frente a los casos de covid en Nudelpa- Coca Cola del departamento de Beni, 14 mayo 2020;  Indara: convocatoria de emergencia el sindicato de trabajadores fabriles Indara SRL., 18 de mayo de 2020; Trabajadores denuncian caso positivo en empacar y falta de medidas de bioseguridad, 18 de mayo de 2020; Obreros en Belén denuncian que se los somete al extremo del medio sueldo, el hambre y aumentan a 20 los casos covid-19, 21 de mayo de 2020; En ingenio San Aurelio han fallecido dos trabajadores por covid-19 .denuncian que no les pagaron el 90% del salario de abril a los que ya tenían contrato, 05 de junio de 2020.

[iv] Webinar Situación laboral en tiempos de COVID-19. Alcances y retos de una nueva modalidad de trabajo. organizada por la Cámara de Comercio y Servicios de Cochabamba.

[v] Abundan denuncias de empresas que no quieren desinfectar la empresa pese a tener trabajadores contagiados, también se denuncian las condiciones precarias de limpieza, etc.

[vi] Denuncias registradas en la página de Faceebook Ministerio de Trabajo Bolivia.

[vii] CEDLA  (2020) La cuarentena se acata, los derechos laborales se incumplen en Alerta

Laboral: Trabajadores y crisis del COVID-19: "llueve sobre mojado", Nº 87.

[viii] Protestan por inestabilidad laboral en petrolera boliviana YPFB. Publicado en https://www.telesurtv.net/, el 18 de febrero de 2020.

[ix] Maestros urbanos denuncian 800 “despidos” con declaratoria de acefalías. Publicado en ttps://www.la-razon.com, el 07 de mayo de 2020.

[x] Alvater, Elmar (976) “Estado y Capitalismo Notas sobre algunos problemas

de intervención estatal” en  Cuadernos Políticos, número 9, editorial Era, México, D.F., pp. 9-30.

[xi] Instructivo INS/ASUSS/DGE/DJ No. 003/2020, que determinaba que el Covid-19 debe ser catalogado como un accidente de trabajo

[xii] La Cainco pide dejar sin efecto catalogación de Covid-19 como accidente laboral. Publicado en: https://www.paginasiete.bo, el 22 de mayo de 2020

[xiii] Asosur y las cámaras de Comercio e Industria piden anular la disposición que califica al COVID-19 como accidente de trabajo. Publicado en https://www.la-razon.com, el 23 de mayo de 2020.